Luego de la aprobación y entrada en vigencia del Código de Trabajo salvadoreño, desde el año 1963 y su posterior reforma en el año de 1972, las empresas adquirieron una nueva obligación, y es que todas aquellas que tengan 10 trabajadores o más, deberán redactar y obtener la aprobación de su propio Reglamento Interno de Trabajo.

El Código de Trabajo de El Salvador, dentro de sus disposiciones, indica que la finalidad de la elaboración y aprobación del Reglamento Interno de Trabajo es establecer con claridad las reglas obligatorias de orden técnico o administrativo que sean necesarias y útiles para la buena marcha de la empresa, a las cuales tanto el patrono como el empleado deben sujetarse.

El Reglamento Interno de Trabajo debe redactarse de conformidad al Código de Trabajo, leyes, contratos y convenciones en materia laboral que lo afecten, así como adecuarse a las actividades características del rubro de la empresa.

La importancia de contar con un Reglamento Interno de Trabajo para las empresas, recae en los temas que se pueden reglar por medio del mismo, es decir, aquellos temas que el Código de Trabajo y las demás leyes que afecten las operaciones normales de las empresas, no regulan de manera específica y concreta, atendiendo a la especialidad de cada caso en particular.

Es así, que resulta necesario que las empresas elaboren su propio Reglamento Interno de Trabajo, ya que este documento es inherente al funcionamiento de la misma, pues sin éste, se carecería de normas que regulen la actividad laboral, la forma de organización administrativa y técnica de cada organización.

Dentro del Reglamento Interno de Trabajo se regulan, entre otros temas, los siguientes: las obligaciones y derechos tanto de los trabajadores como de los patronos, la forma en cómo gozarán las vacaciones anuales todos los empleados, los horarios de trabajo (atendiendo al rubro empresarial), cuáles son las prohibiciones que tienen los trabajadores y los patronos, la protección en materia de regulación de riesgos profesionales y salud ocupacional; y, las sanciones o faltas disciplinarias que serán aplicables.

Luego de su elaboración, los Reglamentos Internos deben de ser revisados y aprobados por la Dirección General de Trabajo del Ministerio de Trabajo de El Salvador, quienes harán las observaciones que consideren pertinentes –si fuese el caso- y otorgaron la aprobación que corresponda. Luego de aprobado, el Reglamento Interno debe hacerse del conocimiento de todos los empleados de la empresa y entrará en vigencia 15 días después de dicho conocimiento.